16 agosto 2017
Hoy en día todos estamos acostumbrados a oír hablar de los beneficios que tiene hacer deporte para nuestra salud, y palabras que antes nos podían resultar un poco raras, como running, stretching, yoga o pilates, ya forman parte de nuestro día a día y de las conversaciones más cotidianas. Sin embargo, todavía hay muchas personas que no se animan a dar el paso a la healthy life y a las que les cuesta ponerse unas deportivas y salir a hacer deporte. No obstante, a esas personas les interesará saber que cada vez son más los científicos y expertos que ponen de manifiesto los beneficios que tienen una actividad tan simple y barata como correr.
¿Cómo dar el salto y comenzar a correr? Algunos consejos prácticos
En primer lugar, deberemos contar con unas buenas zapatillas con las que no solo nos aseguraremos de que nuestros pies, rodillas y músculos no sufran sino con las que podremos mejorar nuestro ritmo y nuestras marcas en carrera. Además, a pesar de lo que mucha gente puede pensar, comprar unas zapatillas especializadas no es un gasto al alcance de unos pocos, tal y como podemos ver en las diferentes opciones de zapatillas de running en Don Deporte, una tienda de deportes donde podremos encontrar las deportivas que mejor se adapten a nuestras necesidades y a nuestras características físicas. Independientemente de que seamos principiantes o de que ya llevemos años en el mundo del running, contar con unas buenas zapatillas de Adidas, Asics, Nike, Mizuno, J’Hayber o Saucony sin duda mejorarán nuestros entrenamientos y nuestras carreras.
En segundo lugar, y siguiendo con la vestimenta, deberemos utilizar ropa cómoda, adecuada a la temperatura externa (sobre todo en invierno, donde a pesar del frío de la calle no nos conviene ir demasiado abrigados puesto que con el movimiento pasaremos calor) y de nuestra talla (ni demasiado ajustada ni demasiado ancha). Es cierto que también existen equipaciones más técnicas, con mallas y camisetas especiales para una buena transpiración o calcetines más cómodos y efectivos para usar con zapatillas de running (de diferente grosor en función de las necesidades de cada corredor), no obstante, esos aspectos son secundarios cuando estamos empezando y será a medida que le cojamos el gusto a correr cuando pasarán a un primer plano. Al fin y al cabo, el objetivo es adquirir el hábito de salir a correr semanalmente, no desilusionarnos al ver que no tenemos el material más técnico.
En tercer lugar, también será interesante saber si vamos a correr en la calle o si lo vamos a hacer en la cinta de correr, ya sea en un gimnasio ya sea en nuestra propia casa. Y a pesar de que en este sentido nos encontramos con puristas que defienden el correr en la calle y que ven con hastío las cintas de los gimnasios, una vez más debemos recordar que lo importante es adquirir el hábito saludable. Además, las necesidades de las personas no son las mismas y el deporte que hagamos se debe adaptar a nuestras vidas, y no al revés, por lo que el mejor consejo que pueden recibir aquellas personas que están empezando es que prueben ambas opciones y decidan cuál les va mejor. Puede que incluso alternen una y otra en función del tiempo.
Finalmente, es muy recomendable contar con la ayuda de un profesional del deporte para evitar posibles lesiones y para comenzar con un plan de entrenamiento adecuado y adaptado a nuestra condición física. Aunque veamos una actividad como el running como algo fácil y que sabe hacer todo el mundo, si queremos cuidar bien de nuestro cuerpo y si queremos obtener todos los beneficios que tiene para la salud, lo mejor será dejarnos asesorar al principio para así ir acostumbrándonos poco a poco a esta nueva forma de vida.
El running: uno de los mejores deportes para mejorar nuestra salud
Por último, y como ya hemos mencionado brevemente, se ha demostrado que correr es una de las actividades que tiene más beneficios para nuestra salud, tal y como podemos ver en este estudio de la Universidad de Standford donde se vio que correr ralentizaba los efectos del envejecimiento tras estudiar a más de 500 corredores durante más de veinte años. De esta manera, y como podemos leer en el estudio, las personas mayores que llevaban tiempo corriendo tenían menos minusvalías, una esperanza de vida activa más larga, menos enfermedades y tenían la mitad de posibilidades de morir a una edad temprana que aquellas personas que no corrían. Un mensaje a favor del deporte que sin duda hará cambiar de opinión a más de uno. Al fin y al cabo, todos tenemos algún parque o gimnasio cerca donde poder estrenar nuestras nuevas zapatillas de running y comenzar un nuevo estilo de vida.
