Septiembre es el mes propicio para comenzar nuevos proyectos y realizar cambios. Necesitamos energía y entusiasmo para encarar la nueva etapa otoñal. El haber desconectado o no en tus vacaciones de verano influirá en las ganas que tienes a la hora de afrontar nuevos objetivos.
Si no fuiste capaz de relajarte en las vacaciones hoy te cuento, los 3 principales motivos:
1.Falta de sueño y de tiempo libre para ti.
En vacaciones las rutinas desaparecen, nos acostamos más tarde e improvisamos más los horarios nocturnos. Haber descuidado tu calidad y cantidad de sueño te producirá más estrés y apatía pudiendo interferir en el nuevo comienzo de estación. Acostarse y levantarse a la misma hora casi todos los días (aunque lo retrases por las horas de luz), no dormir más de 30 minutos de siesta y evitar el consumo de estimulantes como uso de aparatos electrónicos antes de ir a la cama.
2. Planificar cada una de las actividades sin dar lugar a la improvisación puede dar lugar al exceso y cansancio. Es conveniente dejar huecos en la agenda sólo para ti y las actividades que verdaderamente te agradan. Saber parar a tiempo actividades obligatorias que realizas incluso en vacaciones causadas por autoexigencias y perfeccionismo ( ej. hacer las camas justo al levantarte en tu apartamento de verano)
3. Estar pendiente del móvil cada 5 minutos. Dejar encendidas las notificaciones de las redes sociales y whatsapp, estar disponible para los demás a través del celular las 24 horas y no centrarte más que en la pantalla ignorando sonidos de la naturaleza, conversaciones, etc. Es más que suficiente para que pienses que no has tenido vacaciones este verano.
Toma nota de estos consejos para que el próximo año puedas presumir de una “desconexión 10”.