09 marzo 2018
No logró escuchar los pasos que subían por la escalera. El comienzo de 'Carrie' la tenía atrapada. No sabía que no iba tener tiempo a acabarla. Sin poder reaccionar, solo pudo sentir esa sensación, quién sabe si del corazón o de la cabeza, que nos indica que no estamos solos en una habitación. Cuando se quiso dar la vuelta ya era demasiado tarde. 'Carrie' cayó de sus manos y, a la vez, mientras la agarraba del pescuezo, su amiga Karla gritaba algo así como "auuuuuurrrrrffff".
¿Qué es el suspense?
Probablemente, no se haya hecho mejor definición del suspense que la que hizo Alfred Hitchcock en su mítica entrevista con el también director francés François Truffaut. En este libro-entrevista, Hitchcock comparaba la sorpresa con el suspense y, según él, la diferencia entre ambas era la siguiente:
“La diferencia entre el suspense y la sorpresa es muy simple […] Nosotros estamos hablando, acaso hay una bomba debajo de esta mesa y nuestra conversación es muy anodina, no sucede nada especial y de repente: bum, explosión. […] Examinemos ahora el suspense. La bomba está debajo de la mesa y el público lo sabe, probablemente porque ha visto que el anarquista la ponía. El público sabe que la bomba estallará a la una y sabe que es la una menos cuarto (hay un reloj en el decorado); la misma conversación anodina se vuelve de repente muy interesante porque el público participa en la escena.”
El suspense siempre ha tenido un lugar primordial tanto entre las temáticas de cine como en las de la literatura. Al fin y al cabo, por alguna razón, el suspense nos engancha. Algunas teorías afirman que el miedo y el suspense generan una hiperactivación física, una descarga de adrenalina o dopamina que nos sienta bien. Otras, que este tipo de historias nos permiten crear o presenciar impulsos humanos que no están socialmente aceptados.
De cualquier forma, aunque todavía no sepamos la razón exacta, el suspense gusta. Ya sea en su versión más comedida o en la más gore, hay algo en este tipo de narraciones que nos atrae y nos engancha. Tanto es así, que hasta páginas de literatura como The Short Story Project, uno de los nuevos proyectos más interesantes en el mundo de la ficción literaria por internet, guardan un espacio prominente en su página para los cuentos de terror.
Los referentes de la literatura de suspense
Así como Hitchcock es el dios del suspense en el cine, dentro de la literatura de suspense hay varios autores a los que podemos considerar como los ‘padrinos’ del género. Además, cada uno de ellos, lleva asociado un subgénero del suspense:
El padre del género de suspense y de terror y maestro universal de los cuentos cortos, Poe cultivó todo tipo de historias relacionadas con el suspense. Principalmente, podríamos dividir su obra de suspense entre cuentos de ciencia ficción, detectivescos y macabros, siendo en todos ellos un pionero.
Entre sus obras más destacadas podemos situar El pozo y el péndulo, Los crímenes de la calle Morgue, El escarabajo de oro o La caída de la Casa Usher.
Lovecraft es al suspense de ciencia ficción lo que Los Beatles a la música pop: un mito y el ídolo de millones de aficionados al género. Fue el primero en incorporar a los relatos de terror las ideas de civilizaciones alienígenas, así como los viajes en el tiempo y la existencia de otras dimensiones.
Tal es su importancia que va mucho más allá de la literatura, y ha dejado marca en decenas de bandas de heavy metal —Iron Maiden, Metallica, Morbid Angel—, hasta cientos de películas y videojuegos.
Este antiguo miembro del MI6 británico se convirtió, de la noche a la mañana, en un mito del género de suspense y espías con la novela El espía que surgió del frío. Desde ese momento, se convirtió en un habitual de la lista de los best-sellers gracias a sus novelas siempre ambientadas en el mundo del espionaje.
Si hay una firma de éxito en el mundo del suspense, esa es la de Stephen King, sinónimo de éxito en cualquier libro que haya publicado. Con alrededor de 50 novelas y 200 relatos, su producción es asombrosa y ha cultivado cualquier tipo de subgénero dentro del suspenso, principalmente terror, fantasía y ciencia ficción.
Entre sus obras míticas: Carrie, El Resplandor, La Torre Oscura, o It.
