El Ayuntamiento ordena retirar las placas franquistas de la vivienda

El Ayuntamiento de Mérida ha iniciado hace más de una semana y media a la retirada de las placas del antiguo Ministerio de Vivienda franquista, a solicitud de la Diputación Provincial de Badajoz, para el cumplimiento de la Ley de Memoria Histórica.

En concreto, la retirada de estas places se ha comenzado en la Barriada de las Sindicales de la capital extremeña, y se prolongará hasta finales de enero, donde en algunos bloques se tienen que reponer los números y en otros, simplemente, se están retirando las placas de las fachadas.

En cuanto a los nombres de las calles, explica el Ayuntamiento de Mérida en nota de prensa que para esta labor "se ha encargado a un experto que haga una valoración", porque "hay que ver si son personas con delitos de sangre", ha dicho.

"Eso son cuestiones que deben recomendar expertos y, en función de las alegaciones que hagamos, haremos lo que nos diga la Diputación de Badajoz", ha explicado el delegado de Obras, Pedro Blas Vadillo, este jueves en rueda de prensa en Mérida.

En su intervención, Vadillo ha señalado que se ha comenzado con la adecuación y adecentamiento del entorno del local social de 'La Corchera', en el que se realizan trabajos de renovación del firme de la pista, como reposición de las redes del fondo de la pista como la red perimetral que habían sustraído.

Además, ha señalado que "una de las pistas de pádel va a mantenerse y la otra se va a convertir en una pista de mini básquet", según ha informado en nota de prensa el consistorio emeritense.

Asimismo, se van a poner juegos infantiles en una zona que hay de tierra para "darle vida al entorno de la Corchera", a la vez que, según ha anunciado, en pocos meses se va actuar sobre las pistas del Prado que se van a convertir en una zona de deportes y arte urbanos renovándose las pistas y la zona de vestuarios, tal y como ha solicitado el presidente de la Asociación de Vecinos.

El delegado ha destacado que estas actuaciones son el fruto de las visitas que van realizando a las distintas barriadas, donde se dan "cuenta de las carencias" y hacen los que pueden, "dentro de la capacidad presupuestaria, para que la gente recupere los espacios vecinales".