26 abril 2018
Aprender matemáticas implica desarrollar la intuición y la capacidad crítica de la persona. Forman parte de un área que no puede sustituirse por otra en base a su razonamiento y formalismo, puesto que es una ciencia única y totalmente necesaria en nuestras vidas.
El rechazo de los jóvenes hacia las matemáticas
Los niños y los jóvenes suelen tener problemas con esta asignatura, suele ser la materia pendiente de un gran porcentaje de adolescentes que no consiguen cogerle el truco a sus operaciones, cálculos y problemas. La mayoría ni siquiera se interesan en desarrollar destreza matemática, no solo para pasar las pruebas y los exámenes académicos, sino para aplicar en su vida cotidiana. Las clases de matemáticas no suelen ser las más atractivas para los jóvenes, llegando a mostrar el desasosiego de los estudiantes cuando es hora de comenzar dicha lección.
¿Pero a qué se debe este gran rechazo? El problema de que los jóvenes no toleran esta materia y sea rechazada popularmente se debe directamente a la influencia que tiene con variables de naturaleza tanto emocional como cognitiva.
En primer lugar, este desaliento está causado por la dificultad, hablando de manera objetiva, que tiene esta materia como disciplina. Aunque la dificultad es una cuestión personal, ya que no todos vemos la misma complejidad a diferentes saberes y ciencias. Es decir, para una persona la historia puede parecerle mucho más sencilla que la geografía o viceversa. Sin embargo, con las matemáticas la visión de complejidad cambia, ya que su ciencia se basa en la habilidad para realizar una operación o cálculo, todos los sentidos deben de estar atentos y la mente muy concentrada para no realizar ningún fallo. La más mínima equivocación y todo el proceso no servirá para nada, ya que la respuesta será errónea. Esta objetividad provoca un gran rechazo entre la sociedad, sobre todo entre los más jóvenes.
En segundo lugar, esta dificultad de la que tanto se habla también se debe a la parte o visión subjetiva de la disciplina, es decir, en cómo el individuo afronta esa complejidad de un modo personal y único. Aunque estemos hablando de una ciencia objetiva, ya que se basa en números y fórmulas matemáticas, el modo en el que cada persona decida seguir para llegar a tales convicciones es totalmente personal y subjetivo. El problema reside en que nadie nos ha explicado esto. Normalmente, el profesor o la profesora enseña una lección matemática en la pizarra poniendo un ejemplo. El docente en cuestión plantea la forma que él o ella considera más viable para la resolución del problema, sin embargo, ese método no tiene porque ser el más fácil para los alumnos. Se imparte directamente el modo de pensar y razonar, en lugar de enfocarlo de otro modo mucho más justo: que cada uno encuentre la forma que le resulta más fácil para llegar a la solución. De este modo, la frustración que tienen muchos jóvenes con esta disciplina desaparecería inmediatamente.
La clave de la cuestión está en que nunca nos han enseñado cómo estudiar esta disciplina, por lo que desde el principio en el colegio nos hemos sentido perdidos. Nadie nos la ha enfocado de un modo atractivo ni funcional para encontrarle una utilidad real en nuestro día a día. Pero este cambio de visión empieza a contemplarse en iniciativas como ekuatio donde el objetivo es motivar a los jóvenes para que comprendan y amen las matemáticas.
Usos de las matemáticas en la vida cotidiana
Las matemáticas juegan un papel muy importante en la vida social de las personas, puesto que están presentes en cualquier momento del día a día. Algunos ejemplos de ello es el uso de los cajeros automáticos, las redes de comunicaciones de teléfonos móviles, las predicciones meteorológicas, las nuevas tecnologías de la información o la arquitectura de un edificio.
Existen otras áreas en las que se aplica las matemáticas que pueden sorprenderte por no considerarse tan obvias como las anteriores como su aplicación en una obra de arte, en la publicidad, en el cine, cuando lees un libro, o en la música. También en aspectos cotidianos del día a día cuando detectamos engaños en facturas con IVA desglosado, así como en préstamos económicos. Incluso el mismo NIF identifica a cada ciudadano mediante factores de comprobación que están basados en conceptos matemáticos.
De tal modo, una de las maneras más eficientes de motivar a los jóvenes para modificar la percepción que tienen de esta disciplina se basa en presentarlas de un modo ameno y conectado con otras materias o prácticas diarias en las que puedan percatarse de la importancia que tienen las matemáticas en la vida cotidiana.
