21 mayo 2018
Estudio que ha publicado Fundación Telefónica y que quiere familiarizar al lector con uno de los principales vectores de crecimiento de la era digital.
El tamaño del mercado de los datos en España alcanzó en 2016 los 3.261 millones de euros, una cuarta parte de su peso en Alemania (12.925 millones de €) o Reino Unido (13.313 millones de €), que es la economía que lidera este ranking europeo y uno de los países más avanzados en la economía de los datos.
Los coautores indican en el estudio que el tamaño del mercado de los datos en España es relativamente menor que el que le correspondería, a juzgar por el tamaño de su economía en el conjunto de la Unión Europea.
El libro se ha presentado este lunes en un acto institucional celebrado en las Casas Consistoriales de Badajoz y que ha contado con el alcalde de Badajoz, Francisco Javier Fragoso Martínez; el catedrático de Economía de la Empresa en la Universidad Autónoma de Madrid y director del estudio, Emilio Ontiveros, y el gerente de Coordinación, publicaciones y proyectos transversales de Cultura digital de Fundación Telefónica, Pablo Gonzalo.
A continuación, se ha celebrado una mesa redonda en torno al libro en la que han intervenido el secretario General de Ciencia, Tecnología e Innovación de la Junta de Extremadura, Jesús Alonso Sánchez; el director de Telefónica en Extremadura, Guillermo Santamaría, y el subdirector de Sistemas de Información del Servicio Extremeño de Salud, Santiago Thovar.
Ha moderado el debate la gerente de Estudios, investigaciones y publicaciones de Cultura digital de Fundación Telefónica, Rosa María Sainz..
De esta forma, los coautores de Economía de los datos. Economía 4.0 coinciden en que se está produciendo un trasvase del volumen de la actividad desarrollada por los sectores económicos tradicionales hacia aquellos otros que emergen en forma de plataformas con motivo de la revolución digital: los datos son un nuevo factor de producción, como el capital físico, humano o tecnológico.
"La economía de los datos abarca aquellos productos y servicios que han sido recogidos, procesados, elaborados y transmitidos a través de infraestructuras digitales de información o tecnologías digitales", han señalado.
Los expertos del estudio, dirigido por Emilio Ontiveros y coordinado por Verónica López Sabater y en el que colaboran Diego Vizcaíno, María Romero y Alejandro Llorente, señalan que es el uso y no tanto la penetración de la tecnología la que determina el valor que es capaz de generar la economía digital.
Los autores consideran que cualquier acumulación de datos cuya vida útil supera el año debe registrarse y valorarse como una inversión en un activo fijo.
LA ECONOMÍA DE LOS DATOS: UN NUEVO PARADIGMA
Cabe destacar que, los datos que los ciudadanos generan, almacenan, transmiten o analizan desvelan sus gustos u opiniones, entre otra mucha información.
De ahí, que sea cada vez más necesario aprovechar al máximo las oportunidades que brindan y, por otro, protegerse de la exposición que los ciudadanos hacen de sus datos.
Gracias a las innovaciones en Big Data y en Data Science -métodos
computacionales, matemáticos y estadísticos- se están formando nuevos modelos de negocio hasta hace poco impensables con el dato como nuevo "insumo" productivo que acompaña los procesos de toma de decisiones en los ámbitos más relevantes.
El crecimiento exponencial de su volumen, la variedad y velocidad de generación de datos y las mayores capacidades para su captura, almacenamiento, procesamiento y análisis hacen que empresas y administraciones públicas dediquen sus esfuerzos a la inversión y uso de herramientas digitales para optimizar y proteger los datos, germen de la información y el conocimiento.
De hecho, el informe señala que Europa es la región del mundo en que la protección de datos ha alcanzado un nivel más elevado y sus derechos básicos paneuropeos están contemplados en el estándar internacional recogidos en el Reglamento General de Protección de Datos (RGPD) de la UE, de obligado cumplimiento a partir del 25 de mayo de este año.
La transición de la economía del tradicional "brick and mortar" -de presencia física y basada en el cara a cara- a la economía de la información supone un reto de capacidad para las empresas, que han de reajustarse a nuevos modelos de negocio.
Entre los desafíos de los nuevos modelos de negocio, los autores
destacan la residencia y el almacenamiento de los datos, necesarios para mejorar su control y equilibrar el derecho a la propiedad intelectual, la privacidad del consumidor y la innovación de las empresas, siguiendo la Estrategia Europea del Mercado Único Digital.
Además de reforzar mecanismos como los términos y condiciones de uso, los avisos de privacidad y la eliminación o anonimia de los contenidos para mantener un estándar de privacidad y concienciar más a la sociedad sobre su exposición en el mundo digital, junto con el estricto cumplimiento del derecho de la información que todo titular de los datos tiene que conocer sobre el tratamiento, uso y destino que se van a aplicar a los datos personales de su titularidad.
