El alba rompió empañada por el humo del combate del día anterior. La sangre vertida embarrizaba el terreno, los cadáveres, (que se contaban por miles) hacían imposible caminar ...
Unos días después del desembarco de Barbarroja, Ulamen, el gobernador persa, llegó por tierra con sus 30.000 soldados
Bien sabe Dios que tras la salida de Venecia de la Liga el emperador hizo todo lo posible por convencer a la Serenissima...