Creo que hay unanimidad en las conversaciones de calle, las que se oyen en los parques, en las tiendas o en los bares. Esas conversaciones, espontáneas, critican las consecuencias de las políticas que se están aplicando.
A medida que pasa el tiempo y no se aplican políticas de creación de empleo, se incrementa el desamparo hasta el punto de que en febrero de este año alcanzamos la cantidad de 70.000 personas en Extremadura sin ningún tipo de prestación.