Creo que hay unanimidad en las conversaciones de calle, las que se oyen en los parques, en las tiendas o en los bares. Esas conversaciones, espontáneas, critican las consecuencias de las políticas que se están aplicando.
Me parece una desfachatez escuchar a hombres en el debate del aborto usando la moral como paraguas.
Cada cierto tiempo se abre el debate sobre la sostenibilidad de las pensiones.