Modificar las portadas de los libros de tus hijos

Si ya se ha decidido a modificar la portada de alguno o de todos los libros de sus hijos, está muy bien. Lo cierto es que comenzar de cero puede ser abrumador, sobre todo porque nadie quiere resultados tan simples, menos si se trata para los hijos. Lo mejor en todo caso es buscar sitios en los que se puedan revisar y descargar formatos para hacerle una portada manual de biología, de literatura, de ciencias naturales, entre otras tantas asignaturas, porque así se aligerará el trabajo y seguramente se encontrarán ideas en las que no se había pensado antes.

Consejos para que queden bien

No olvidar la información básica: aunque sea la portada más bonita y divertida del mundo, no se debe olvidar el hecho de que será para utilizarlo en la escuela, de manera que debe contener el nombre de la materia, el grado, el nombre del alumno y del profesor, para que incluso siendo hermosa siga siendo funcional.
Materiales: la elección de materiales siempre quedará a modo muy personal, sobre todo de acuerdo a los ejemplos o formatos que se encuentren en internet. Lo que sí es evidente es el hecho de que se puede aprovechar la portada personalizada para brindar una capa adicional de protección, algo que en algunas edades de los niños acabará siendo una de las mejores decisiones que se puedan tomar, al tiempo que se garantiza que los libros no sufran ningún tipo de daños o accidentes.
Referencias a la asignatura: si es de biología, imágenes de la naturaleza o el cuerpo humano; si es de literatura, libros o imágenes de personajes literarios famosos; si es de geografía, el mapa del mundo o de España. Hacer referencias a la asignatura hace que los niños puedan encontrarlos más rápido, si llevan varios libros al colegio, pero también evitará que se extravíen, porque lo reconocerán fácilmente.

Ventajas de crear portadas personalizadas para los libros de tus hijos

Para muchos padres pudiera parecer que se trata de un gasto adicional que se está realizando con los libros, pero lo cierto es que acabará siendo una decisión muy ventajosa desde todo punto de vista.

Fomenta el cuidado: al hacer la portada, lo mejor es incluir a los niños en el proceso. No buscar la perfección de los resultados, sino la implicación total de los niños, les hará sentir que los libros son más importantes y fomentarán su cuidado.
Proteger los libros: la portada les dará unicidad y originalidad, por lo que serán fáciles de encontrar si se pierden, soportarán mejor el paso del tiempo y evitarán los rayones accidentales, por ejemplo.
Diferenciarse: a los niños les gusta tener objetos que sean únicos y, mucho más, si han sido creados por ellos hasta cierto punto. Eso les hace sentirse muy orgullosos e incluso en sí mismo puede ser una fuerte motivación para poner mayor empeño a esa asignatura, con lo que convenientemente también se benefician los padres.

Identificar los libros, darles una nueva cara cuando tienen portadas maltratadas, brindarles una capa adicional de protección, pero sobre todo incentivar a que los niños los cuiden y los aprovechen, son algunas de las razones por las que hacer portadas para los libros del colegio de sus hijos acabará siendo una excelente decisión.

Aunque los costes pueden variar, lo más recomendable es comenzar utilizando materiales e implementos que ya se tengan en casa, lo que favorecerá a la creatividad, pero que en algunos casos permitirá obtener resultados geniales a coste cero, algo mucho más importante por estos tiempos, ya que la ganancia sería doble.