18 marzo 2020
Ep.
El Ayuntamiento de Cáceres ha paralizado todas las obras propias que estaba desarrollando en la ciudad, como el adecentamiento de un área en el Madruelo para aparcamientos, y ha ordenado a los coordinadores de salud de "todas" las obras municipales que decreten las medidas de seguridad necesarias para cumplir con los criterios de prevención de contagio del coronavirus.
También se ha paralizado la rehabilitación de la muralla. Así, las actuaciones que estaba ejecutando la brigada de obras están "todas" paradas y solo se trabaja en intervenciones concretas por alguna emergencia.
En cuanto a las que estaban adjudicadas a empresas "no están paradas algunas" porque el ayuntamiento "no tiene la herramienta legal" para obligar a paralizar estos proyectos.
El alcalde de la ciudad Luis Salaya ha explicado este miércoles en una rueda de prensa online que "no" se pueden parar pero sí tomar la medida de "redoblar" la vigilancia para exigir el cumplimiento de la medidas de seguridad.
"Están llegando quejas de obras que están funcionando pero no podemos obligar a parar a nadie aunque nuestra recomendación es que, en la medida de lo posible, cese su actividad, salvo los servicios básicos...y nuestra exigencia a los empresarios es que cumplan estrictamente con las medidas de seguridad a las que sí están obligados", ha resaltado el regidor.
Lo que sí hay que respetar son las medidas de seguridad, y si hay quejas sobre esto, el ayuntamiento traslada la denuncia a la Policía Nacional para que intervenga.
"Entendemos que es fundamental que se cumplan estas medidas", ha resaltado el alcalde que entienden que "tampoco quiere decir que todos los operarios tienen llevar mascarilla", ya que "son un bien muy necesario para el personal sanitario y hay que llevarla en los casos en los que haya una exposición".
SE REDUCE LA FRECUENCIA DEL AUTOBÚS
En relación al servicio de autobuses urbanos, el alcalde ha anunciado que, desde que comenzó la crisis del coronavirus, se ha reducido la afluencia de los 19.000 usuarios diarios a unos 1.700 viajeros, lo que supone menos de un 9% de la ocupación habitual del autobús.
Cabe recordar que ya se había decidido que los vehículos solo permitieran el 40% de su aforo pero la cifra de usuarios está muy por debajo, por lo que se ha estimado que se reduzca la frecuencia de paso por las paradas de los distintos barrios.
A partir de este jueves, los autobuses urbanos comenzarán a funcionar con la misma frecuencia que si fuera domingo, es decir, pasarán cada hora en la mayor parte de las líneas.
Además, se seguirá analizando esta situación y "dentro de cuatro o cinco días" no se descarta tomar nuevas medidas la próxima semana y "volver a reducir la frecuencia", ha explicado Salaya.
