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'Calígula' exhibe en Mérida la despiadada y consciente maldad de un monstruo que persigue todo lo que no puede tener

Un 'Calígula' lúcido, alejado de su habitual imagen de locura, consciente de toda la maldad y crueldad que se le atribuye al emperador romano que quería tener en sus manos la luna como símbolo de todo lo imposible, de todo aquello que no tenía y que no podía tener, ha subido la noche de este miércoles al Teatro Romano de Mérida para poner en escena el segundo montaje de la 63 edición del Festival Internacional de Teatro Clásico.

13 julio 2017 | Publicado : 03:07 (13/07/2017) | Actualizado: 03:07 (13/07/2017)



MÉRIDA, 13 (EUROPA PRESS)

Un 'Calígula' lúcido, alejado de su habitual imagen de locura, consciente de toda la maldad y crueldad que se le atribuye al emperador romano que quería tener en sus manos la luna como símbolo de todo lo imposible, de todo aquello que no tenía y que no podía tener, ha subido la noche de este miércoles al Teatro Romano de Mérida para poner en escena el segundo montaje de la 63 edición del Festival Internacional de Teatro Clásico.

Mario Gas dirige una obra basada en el texto de Albert Camus que ha sido ovacionada por las 1.750 personas que han acudido al Teatro Romano de Mérida este miércoles al estreno de esta coproducción del propio festival emeritense, del Teatre Romea y del Grec de Barcelona, hasta donde viajará una vez que este próximo domingo acaben las funciones previstas en la capital extremeña.

Un tirano déspota al que da vida Pablo Derqui, que se estrenaba en Mérida y que ha recibido la más intensa de las ovaciones, al frente de un reparto al que acompañan Borja Espinosa como Quereas, Mónica López como Cesonia, Bernat Quintana como Escipión, Xavier Ripoll como Helicón; y un corifeo formado por Pep Ferrer, Anabel Moreno y Ricardo Moya.

En esta ocasión el Teatro Romano de Mérida presenta una escenografía creada por Paco Azorín que aproxima al espectador al Palazzo della Civiltá del Lavoro de Roma, una enorme tarima que irá ganando protagonismo con el transcurso de la representación, y sobre la que los nueve personajes en escena, con atuendos monocolor (blanco o negro) de época actual, desarrollan toda la acción de un espectáculo que ronda las dos horas.

Mario Gas presenta un Calígula diferente al que habitualmente reconoce el espectador. Se aleja de la locura irracional para aproximarse a un "monstruo" completamente consciente de su maldad, que dice utilizar las leyes de la lógica para regir los designios de los ciudadanos de Roma, ya sea para subirles los impuestos para pagar su último capricho o para condenar a muerte al primero que se le pasa por delante.

El emperador hace gala de una implacable crueldad solo para competir y superar a los dioses. "La única manera de igualarse a los dioses es ser tan cruel como ellos", dice. En uno de los pasajes que sin duda serán más recordados en la presente edición del Festival, el emperador sale a escena bailando los acordes y con el atuendo del mismo David Bowie, acompañado por el Joker y La Máscara, solo para recibir un baño de divinidad de su pueblo.

"Soy puro en el mal", afirma este tirano tan consciente de lo que hace que incluso reconocerá el legítimo deseo de sus víctimas de verle muerto, y que llegado el momento confesará su arrepentimiento por trazar el camino incorrecto hacia su objetivo.

SATISFACCIÓN EN LA COMPAÑÍA

Tras la función, y como es habitual, los actores y el director de la obra han comparecido en una breve rueda de prensa ante los medios de comunicación. El director ha señalado que están "muy contentos" con la reacción del público y con las primeras impresiones intercambiadas en el backstage.

Pablo Derqui ha reconocido que ha sentido los nervios propios del estreno y que ha percibido que el Teatro Romano es un escenario que "arropa mucho". Asimismo, se ha mostrado convencido de que la función "va a crecer más" con el paso de las representaciones en los próximos días.

En esta misma línea, Borja Espinosa, que interpreta a Quereas, ha señalado que una vez superados los nervios iniciales, el resultado ha sido satisfactorio, algo que ha podido percibir asimismo en la interpretación de sus propios compañeros, lo que es síntoma de que el espectáculo "ha ido bien".

'Calígula' es la segunda obra de la 63 edición del Festival de Teatro Clásico de Mérida, tras 'La Orestiada' con la que arrancó el certamen la pasada semana, que permanecerá hasta el 27 de agosto en el Teatro Romano de Mérida, donde se representarán ocho montajes.

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