09 junio 2022
Medir el rendimiento de los empleados en una empresa es una tarea difícil, pero necesaria. La evaluación de las funciones de los trabajadores y su desempeño laboral es de gran ayuda para la toma de decisiones y para conocer si se cumplen los objetivos propuestos de una forma objetiva y profesional, mientras que se respeta el derecho de los empleados a su privacidad.
Cómo medir el desempeño laboral de los empleados es una de las preguntas más habituales en cualquier empresa que tenga una plantilla considerable. Existen muchas metodologías para hacerlo y una de las mejores opciones para medir el rendimiento de los empleados es utilizar un software de evaluación del desempeño. Este tipo de programas permiten definir competencias, establecer guías de evaluación y obtener informes de cada empleado.
Elegir un software es algo muy beneficioso, pues dejan de lado otras posibles formas de medir el desempeño realizadas por personas donde entran en juego las relaciones personales entre empleados o la intuición personal de quien realiza el trabajo, todos ellos factores subjetivos. La medición debe realizarse utilizando aspectos cuantitativos y cualitativos en su justa medida y siempre de forma rigurosa y profesional.
Entre la gran variedad de métodos que podemos encontrar destacamos por su importancia los siguientes:
En este método se reúnen jefe y empleado de manera privada y se tiene una conversación sobre qué problemas están teniendo lugar, las posibles causas y conocer cómo afronta el empleado la situación. Es una forma rudimentaria de hacer una evaluación del desempeño, pero el jefe puede conseguir resultados inmediatos al detectar en esa conversación cuáles son las causas que hacen que el trabajador rinda más o menos.
En esta metodología la empresa establece unos ítems con los que se valora el rendimiento de cada empleado y que tienen una influencia directa sobre la productividad de la empresa. En cada uno de los ítems o puntos se puntúa del 1 al 10 al empleado en función de cómo realiza su trabajo para obtener una nota media al finalizar la evaluación.
Es una forma de medir el rendimiento laboral a través de una lista con frases en las que se describen tareas profesionales tanto en positivo como en negativo. Para cada empleado, el responsable de RR. HH. marcará aquellas que más se ajustan a su forma de trabajar. Cuantas más descripciones positivas marque, mejor será el rendimiento del empleado y viceversa.
Aunque no es una metodología apta para todos los perfiles de empleados, el método del cliente es muy interesante porque aporta una visión externa de los empleados. Los clientes de la empresa deben responder a unas preguntas en las que tienen que valorar el desempeño de los empleados con los que han tenido que tratar de manera directa por causa profesional. Una forma de conseguir una opinión de fuera de la empresa que puede ser de gran ayuda.
En esta metodología de evaluación del desempeño laboral es el propio empleado el que se evalúa a sí mismo. Para ello debe examinar su propio rendimiento, informar sobre cuáles son las áreas que más le dificultan alcanzar sus objetivos y elaborar posibles propuestas de mejora que puedan ser de utilidad.
Medir el desempeño de los empleados es fundamental para las empresas. A través de esta evaluación puede conocer qué trabajadores son más productivos y cuáles no rinden como deben en su puesto de trabajo. Del mismo modo, ayuda a las empresas a descubrir posibles vías de mejora que puedan mejorar la productividad de los empleados.
También es importante para conocer qué empleados están en un puesto acorde a su perfil y cuáles pueden ser reubicados en otras áreas de la empresa con la finalidad de encontrarle un puesto más afín a sus capacidades. Además, puede ser de gran ayuda para solucionar problemas, motivar a los trabajadores y conocer cómo lo ha hecho el departamento de RR. HH. en sus procesos de selección.
Como se puede apreciar, existen multitud de metodologías para evaluar el desempeño profesional de los trabajadores. El uso de softwares es la solución más eficiente y objetiva en la actualidad y por ello su uso se ha extendido a todo tipo de empresas de distintos tamaños y sectores de actividad.
