11 agosto 2020
Anteriormente las impresoras láser solían ser usadas principalmente en negocios y oficinas, pero esto ha cambiado con el pasar del tiempo. Con la aparición de nuevos modelos más potentes y con un precio asequible, hoy también se cuenta en los hogares con equipos de impresión a láser.
Y es que este tipo de impresoras tienen un alto nivel de calidad, ofreciendo un acabado espectacular en cada impresión. El láser permite obtener mejores resultados a una velocidad superior, siendo la mejor opción en cuanto a impresoras se refiere.
Por todos los beneficios en la actualidad estos equipos son ampliamente demandados, ya sea para usarlas en las casas o en el entorno profesional y empresarial. Poseen muchas ventajas, por ejemplo un mayor rendimiento, un resultado más nítido y cartuchos de tinta más duraderos.
Todo lo que se debe saber sobre el equipo
La invención de las impresoras láser se dio durante la década de los 70, más concretamente en 1973. Su funcionamiento y método de impresión fue bastante novedoso para la época, y conforme pasaba el tiempo los fabricantes las fueron actualizando e incorporando nuevas tecnologías para asegurar que la impresión láser se mantuviera en vanguardia.
Conocer las partes de la impresora láser y cómo funcionan es necesario a la hora de realizar la compra. Entre las más importantes están el tambor fotoconductor, el depósito de tóner y el haz láser. Éstas son las indispensables para que el método láser funcione.
El funcionamiento interno de la impresora es bastante sencillo de entender. La tinta especial que se encuentra en el tóner está formada por pigmentos. El haz láser grabará en un cilindro fotosensible todo el contenido de la imagen o documento, proceso que ocurre a través de cargas electroestáticas.
El cilindro luego pasará por el depósito de tóner con el objetivo de que los pigmentos de la tinta se adhieran a él y al patrón que contiene (enviado por el haz láser). Ya finalizado este proceso, solo queda que el papel pase por el cilindro, para que el polvo de los pigmentos caiga y se fije con la ayuda del calor emitido por el láser.
Existe una gran variedad de dispositivos para imprimir a láser disponibles en el mercado. Entre las impresoras láser a color más recomendadas podemos encontrar modelos de prestigiosas marcas como HP, Xerox, Canon o Brother.
Muchas ventajas las convierten en las preferidas
Aunque cada modelo varía en eficiencia y nivel de calidad, todas las impresoras láser tienen una serie de ventajas en común frente a las que funcionan con base en tinta.
Ahorro económico: Muchos piensan en adquirir las impresoras láser a color debido a que la inversión inicial suele ser un poco mayor. Dicen que estos dispositivos “son caros”, sin embargo, al final significan un alivio económico, pues permiten realizar muchísimas más impresiones con una cantidad menor de tinta.
Además, el precio de las impresoras láser a color ha bajado durante los últimos años, por lo que el presupuesto no es excusa a la hora de actualizarse y dejar la impresión a tinta en el pasado.
Mayor rendimiento: Cuando se habla de impresoras láser, se hace referencia a una velocidad de impresión mucho mayor, lo cual es perfecto si se necesita imprimir gran cantidad de documentos en un tiempo corto.
Tienen la capacidad de manejar un mayor volumen de trabajo, teniendo un ciclo mensual de hasta 20.000 páginas dependiendo del modelo. Para comparar, las impresoras de tinta suelen manejar entre 1.500 y 5.000 hojas cada mes.
Calidad de impresión más alta: la nitidez de la impresión resulta excelente si se realiza mediante láser. Permiten trasladar al papel los textos de una manera mucho más clara, además de obtener colores mucho más brillantes.
Aunque se suele decir que las de tinta son superiores en cuanto a la impresión de fotografías, las de láser no se quedan atrás. Con el pasar de los años han mejorado considerablemente en este aspecto, llegando a obtenerse resultados con una calidad bastante aceptable.
