26 noviembre 2018
Todos sabemos que la cirugía plástica es una de las ramas en la que se especializan los médicos, quienes se ocupan de corregir las deformaciones corporales que influyen negativamente en las funciones o morfología del cuerpo, que impactan en el bienestar psicológico de las personas. Los cirujanos plásticos trabajan con los tejidos corporales, bien para moverlos de lugar, modificarlos o realizar un trasplante de forma que puedan corregir la deformidad, siempre atendiendo a la armonía y proporcionalidad con el resto del cuerpo.
Dentro de la cirugía plástica existe un amplio campo, porque abarca cualquier parte del cuerpo, atendiendo a malformaciones congénitas o las ocasionadas por accidentes, quemaduras, tumores en la piel y muchas otras. La cirugía plástica, como puede observarse, es una especialidad médica bastante integral, porque su campo de acción incluye gran parte del cuerpo humano y además, está dirigida a atender tanto a niños, adultos, como a personas mayores. Adicionalmente, es una especialidad con una función interdisciplinaria que trabaja en conjunto con muchas otras especialidades médicas.
En la era moderna, la cirugía se ha convertido en el aliado de las personas para alcanzar el estereotipo de belleza que se han ideado. Los avances tecnológicos han hecho posible que cada día exista mayor precisión y efectividad en este tipo de operaciones, haciéndolas más seguras, más rápidas y sin lugar a sorpresas, puesto que gracias a la tecnología 3D, los pacientes puede ver cuál sería el resultado de la cirugía antes de someterse a ella.
Sólo en el área de estética, existe una gran variedad de opciones que van desde correcciones de cicatrices, tratamientos faciales, aumento de pecho Madrid, liposucciones, lifting de brazos y muslos, aumento de glúteos, aumento de gemelos y muchos otros tratamientos que, por lo general, ayudan a fortalecer el autoestima de los pacientes.
En el tema de la cirugía plástica, resalta como pionero en tal práctica Egipto, donde se cree que se realizaban trasplantes de tejidos aproximadamente en el año 3.500 a.C. Por su parte, en la India, aproximadamente para el año 2.500 a.C, se dice que se desarrolló una técnica de reconstrucción de la nariz, práctica que se hizo común dado que para la época, a las personas que habían cometido adulterio y a los prisioneros de guerra, se le cortaba la nariz como castigo.
Durante la edad media, no se encuentran vestigios en cuanto al avance en la cirugía plástica, al parecer porque fue prohibida por la Iglesia Católica, cuando era dirigida por el Papa Inocencio III. No obstante, para el año 1896, se ubica la primera técnica quirúrgica llevada a cabo por el doctor Jacob Joseph, quien logró corregir una anomalía congénita de un niño en la separación de sus orejas.
Es en la época de la Primera Guerra Mundial, en la que los expertos concuerdan que se logró una sistematización en materia quirúrgica, dada la imponente necesidad de reparaciones faciales en los soldados supervivientes a la guerra, lo cual contribuyó al perfeccionamiento de la técnica reparadora. En esa coyuntura, destaca el papel de doctor Harold Hillier, quien habría sido el precursor de las reconstrucciones faciales para los militares británicos afectados durante la guerra, lo cual fue materializado en el hospital militar de Cambridge en el año 1917, logrando excelentes resultados, por lo que influyó en la apertura, durante ese año, de un nuevo hospital dedicado a ese tipo de cirugía. Para cuando inicia la segunda guerra mundial, este tipo de hospitales existían por todo el Reino Unido, por lo que la disciplina se afianza como tal y se convierte en imprescindible en el mundo de la medicina.
Lo que sucede posteriormente es la perfección de las técnicas y la exploración hacia otras áreas del cuerpo, así como el invento de nuevos instrumentos y desarrollo de tecnologías para lograr mayor precisión en los tratamientos y hacer posible que, progresivamente, se lograra abarcar más áreas del cuerpo. Luego se avanza a lo que conocemos como la cirugía estética, un campo que no sólo atiende a malformaciones o temas patológicos, sino que busca ayudar a las personas a estar más cómodas y satisfechas con su cuerpo, lo que contribuye a que se sientan con mayor confianza y alegres.
