20 septiembre 2018
Según los datos aportados por la Asociación Nacional de Perfumería y Cosmética, la demanda de perfumes y fragancias aumentó de manera considerable en 2017, convirtiéndose incluso en la categoría que más creció en el mercado español de cosmética y perfumería. Y es que alcanzó una facturación de más de mil trescientos millones de euros, casi un seis por ciento más con respecto al año anterior.
Uno de los principales motivos por los que se ha producido este notable crecimiento ha sido la elevada demanda de perfumes para hombre, ya que se ha incrementado en un siete por ciento. Además, del total de las compras de fragancias masculinas, un noventa por ciento fueron de marcas de gama alta.
En el año 1966 Dior presentó Eau Savage, una fragancia para hombre que sin duda alguna marcó un antes y un después, ya que el resto de grandes marcas que existían en ese momento en el mercado no habían lanzado con anterioridad un olor tan fresco. Y es que en esa época los perfumes masculinos eran demasiado intensos y contundentes, con ciertos toques amaderados.
Pero a partir de ese entonces, los perfumistas han ido creando múltiples fragancias para hombre, ampliando de esa forma el catálogo con una gran variedad de alternativas. De hecho, a día de hoy muchos perfumes se consideran de culto.
Además, hay que tener en cuenta que el mercado de cosmética y perfumería ha dado un gran paso hacia delante gracias al desarrollo de Internet, ya que el consumidor puede adquirir su fragancia desde la comodidad de su hogar. Compra tus perfumes online de manera fácil y rápida accediendo a la página web de una perfumería en línea.
En primer lugar, cabe mencionar de nuevo Eau Savage, una fragancia que rompió moldes, ya que los hombres pudieron disponer de un perfume fresco, algo con lo que no se habían atrevido otras marcas. Este perfume tiene una base de vetiver con notas de romero y limón. Además, para potenciar sus notas cítricas y florales, posee una alta concentración de hedione, un material que procede del absoluto de jazmín.
En 1995 llegó al mercado Opium Pour Homme de Yves Saint Lawrence, una fragancia que incluso fue prohibida en algunos países, ya que consideraban que su nombre incitaba al consumo de este estupefaciente. Es un perfume intenso y contundente con una base de vainilla y notas amaderadas, el cual en principio huele a grosella y anís. Una fragancia para hombres que desean destacar y con las cosas claras.
En 1994 se lanzó L'Eau d'Issey, un perfume muy fresco con toques acuáticos y amaderados, cuyos ingredientes son de una calidad excelente. Se trata de una fragancia compleja, compuesta por una base de cedro, sándalo, vetiver, tabaco y ámbar con notas de ciprés, mandarina, cilantro, bergamota, calone, lima ácida y estragón. Además, tiene componentes centrales de geranio, azafrán y nuez moscada, entre otros.
