21 abril 2017
Quien se embarca en una aventura empresarial, en la mayoría de los casos, ha estimado que el negocio tendría futuro, que su producto o servicio podría llegar un público objetivo lo suficientemente amplio como para obtener beneficios. De la viabilidad de una empresa depende tener clientes, y eso se puede conocer a través de un estudio de mercado.
Las empresas, sin embargo, aspiran a crecer. Tener para ir pagando deudas y para sobrevivir no parece suficiente en comparación con el tiempo y el esfuerzo que se le ha de dedicar al negocio. Se tiene la expectativa de llegar a más personas, de poder invertir más en recursos técnicos y humanos para mejorar la producción, la distribución o la atención al cliente. Y, claro está, para tener mayor calidad de vida.
De tener más compradores interesados trata el persuasivo marketing pero, además de convencer a los que ya conozcan el producto pero aún no lo hayan adquirido, habrá que darle más visibilidad. ¿Cómo?
Cuidar la imagen
Hay que tomarse la frase al pie de la letra y verla, para empezar, desde el enfoque de la identidad visual corporativa, en la que intervienen activamente el diseño gráfico y empresas como aranda-estudio.com. La empresa deberá asumir las consecuencias de las buenas o malas decisiones que tome, por lo que es necesario pararse a pensar desde el mismo momento de diseñar el logo.
Éste debe ser original, único, creativo. No porque hablemos de una empresa de distribución hay que elegir una furgoneta en movimiento, como Apple no tiene un ordenador por logotipo. Hay que elegir un diseño inteligente, que tenga en cuenta la psicología que las formas y los colores ejercen en las personas. Pero también debe ser lo suficientemente sencillo para que el cliente pueda retenerlo, como sucede con el nombre de la empresa o el eslogan.
Por otra parte, una empresa que no transmita cierto valores, no generará confianza y credibilidad. Y, si no lo hace, nadie hablará de ella ni de las bondades de sus productos y servicios, cuando los testimonios de otras personas son también importantes para dar visibilidad. A veces se juega todo a la carta del marketing y no se tiene en cuenta que los clientes actúan como un gancho cualitativo de la marca.
Mejorar el posicionamiento online
Conseguir las primeras posiciones en Google requiere de acciones variadas, suficientes y enmarcadas en estrategias encaminadas a objetivos concretos. Es algo, por lo tanto, que no está alcance de cualquier, de ahí la importancia de contar con una agencia SEO profesional, como kaizen2d.com.
Un error común suele ser, precisamente, la falta de plan. No se trabaja en base a un calendario de acciones, no se varían éstas. Los expertos en posicionamiento consideran que formas efectivas de mejorar son utilizar el blog para generar enlaces, reforzar la marca y estrechar relaciones con el entorno, creando un contenido de calidad que resulte interesante; hacer una buena gestión de las redes sociales; o dar protagonismo a formatos como el vídeo o los GIF, que además se pueden hacer viral con más facilidad.
Tener un blog y perfiles en redes sociales ya implicarían una dedicación exclusiva. Hay que prestar mucha atención a los usuarios, promover que hagan comentarios. Éstos son buenos para el SEO, pero también puede contener críticas que es preciso responder de la forma adecuada, peticiones o sugerencias que hay que considerar.
Todo cuenta, por lo que si no se tienen los medios o los conocimientos necesarios para dedicarse a ello, contratar a una agencia de posicionamiento online puede ser recomendable. Algunas incluso se comprometen a dotar blogs y redes con contenido nuevo regularmente, para que no caigan en el ostracismo.
Invertir en inbound marketing
El de inbound marketing es un concepto que engloba el marketing de contenidos, el marketing en redes sociales y la optimización de motores de búsqueda. Es decir, abarcaría las acciones explicadas más arriba y otras tantas, pero no solo persiguiendo el objetivo de mejorar el posicionamiento en buscadores. Estarían enfocadas a proveer información y mejorar la experiencia del usuario con técnicas no intrusivas, sino a través de newsletter, blogs o entradas en las redes sociales.
Entre las agencias de inbound marketing se encuentra Mk Paradise, que tiene incluso un blog de Inbound Marketing donde da a los usuarios información útil para que pueden marcarse objetivos, estrategias y acciones concretas.
Si de verdad se quiere tener visibilidad para atraer a nuevos usuarios, éstos tendrán que ocupar un lugar central, de forma que se creen contenidos que respondan a sus necesidades, y que además estén optimizados. Se trata de un proceso lento que no dejará ver sus resultados de un día para otro, pero seguro.
Como explican desde MK Paradise, se diferencia del Outbound Marketing en que éste es Marketing de Interrupción. “El usuario queda en un segundo plano porque lo que se intenta es atraerlo hacia nuestro propio interés, no hacia el suyo”, dicen. No existe feedback y, por lo tanto, no se puede conocer sus necesidades y preferencias reales.
Ser activos
El marketing insiste mucho en la actualidad en la presencia y en dinamismo en el online porque sabe que es ahí donde se encuentran los usuarios. A no ser que se trate de un público objetivo de cierta edad, que apenas accede a la Red, en la mayoría de casos hablaremos de personas que se conectan (poco o mucho) con asiduidad a través de dispositivos inteligentes.
Eso no exime de olvidar la importancia de las acciones en el mundo “real”. Para empezar, protegiendo la marca mediante registro (puede registrar tu marca en esta web) para protegerla en el extranjero y evitar que empresas proclives a las malas prácticas, que copian incluso conceptos, resten visibilidad.
No se puede perder de vista el potencial de los medios de comunicación tradicionales (radio, prensa y televisión), la imortancia de estar registrado en directorios comerciales, la presencia en el entorno a través de iniciativas como el patrocinio de eventos de interés local (que hará llegar compromiso por parte de la marca) o las campañas de calle que se caracterizan por la creatividad.
