10 febrero 2019
El juzgado de lo penal número 1 de Plasencia ha comunicado al exalcalde de Carcaboso, Alberto Cañedo Carpintero, su decisión de conmutar la pena de privación de libertad que sobre él recaía por 170 días de trabajos en beneficio de la comunidad, cuyas jornadas y horarios deberán ajustarse a las circunstancias personales y familiares del penado.
Esta decisión será efectiva a partir del próximo miércoles, día 13, en el que Alberto Cañedo deberá acudir al juzgado placentino a prestar su consentimiento.
La plataforma de apoyo a Cañedo ha mostrado en una nota de prensa su "enorme satisfacción" por esta decisión judicial que viene a cumplir una de las demandas que desde este colectivo se venía solicitando para "paliar la enorme injusticia cometida con el exalcalde cacereño".
Aunque la plataforma mantiene que "lo más justo" hubiera sido la revisión de la condena o el indulto, consideran que esta decisión judicial servirá "al menos para garantizar algo de tranquilidad a Cañedo y su entorno familiar".
Miembros de la plataforma han mostrado su agradecimiento a todas las personas y colectivos que, a lo largo de estos años, han mostrado su solidaridad y apoyo a Alberto Cañedo, ya que, sin esa presión social, hubiera sido "imposible", señalan, obtener este acuerdo.
No obstante, desde la plataforma de apoyo a Alberto Cañedo, recuerdan que esta labor continúa, ya que aún queda pendiente una segunda condena a prisión, por la multa no satisfecha en el caso de quebrantamiento de condena, y que puede llevar al alcalde a prisión durante 270 días.
Además, tampoco van a cejar en la "labor de denuncia" iniciada gracias a este caso, para evitar que se repitan situaciones similares, en las que "la mala praxis política de una oposición empeñada en hundir a una persona, lo ha conducido a un martirio que aún no ha finalizado, contraviniendo la voluntad popular de una localidad que ha visto conculcados sus derechos democráticos por los espurios intereses de dos individuos".
La conmutación de la pena de prisión por trabajos a la comunidad "viene a cumplir cierta dosis de justicia poética", ya que, en cierto modo, obliga a Cañedo a seguir realizando "la labor altruista y comunitaria que lleva ejerciendo toda su vida y que, de alguna manera, fue la que le condujo a esta situación".
