04 abril 2018
Navarro ha realizado esta propuesta durante la reunión del Observatorio Regional de Seguridad Vial, celebrada hoy en Mérida, para realizar el balance de seguridad vial del pasado año.
Por primera vez, desde el 2010, el número de accidentes con víctimas en las carreteras extremeñas aumentó en 2017, y aunque el diagnóstico regional es similar al resto de España, el objetivo de la Consejería es conseguir “cero víctimas”, ha manifestado el consejero.
En 2017, se registraron un total de 349 accidentes con víctimas (127 en la provincia de Cáceres y 222 en la provincia de Badajoz), lo que supone un aumento del 7,4% respecto al año 2016.
Pero, mientras que el número de accidentes con fallecidos apenas sufre variación, 19 frente a 18 accidentes del año anterior, el número de fallecidos se eleva a 26, siete más que en 2016.
En el análisis de estos datos, el titular de Economía e Infraestructuras coincide con lo manifestado desde la Dirección General de Tráfico, entendiendo que esta evolución desfavorable se produce “en correlación con el incremento importante en el parque de vehículos y en los desplazamientos”.
No obstante, el factor principal es el humano y las víctimas en Extremadura se producen, fundamentalmente, en colisiones frontales. Las distracciones, la velocidad inadecuada, no respetar las prioridades de paso y el cansancio o sueño, son los principales factores que aparecen en los accidentes mortales o graves.
Por otra parte, ha señalado un menor efecto sobre los conductores en los avances que supusieron el carnet por puntos instaurado en 2006 y la reforma del Código Penal en materia de seguridad vial en 2007, porque “parece que se están relajando”.
Otros de los factores que en su opinión pueden contribuir a reducir la siniestralidad vial es mejorar la tarea de vigilancia que desempeña la Guardia Civil de Tráfico, ya que en Extremadura se ha producido la mayor merma de la flota de automóviles que usan los agentes de tráfico, “148 menos en casi dos años”.
Según el consejero, también se han reducido las pruebas de alcoholemia y drogas, que han demostrado ser “eficaces en la reducción de las víctimas mortales, pero se deja de invertir y empeoran los resultados”.
Asimismo, el consejero ha explicado que en cuanto a las actuaciones de la Junta de Extremadura, en el año 2017 se ejecutaron 8,9 millones de euros en conservación de carreteras y en los presupuestos para 2018 la dotación ha crecido un 11,5% sobre el año anterior, contando con 14,5 millones de euros.
Pero, Navarro ha matizado que, aún es “insuficiente”, por lo que, según ha indicado, la intención es continuar incrementando las partidas destinadas a la conservación de las carreteras, con el fin de “mejorar la seguridad y la conducción de los usuarios”.
