12 julio 2022
La candidata a la presidencia del PP de Extremadura, María Guardiola, se ha mostrado convencida de que el PP es la esperanza y la solución a los problemas que tiene Extremadura y España y ha abogado por un "cambio necesario" después de casi 40 años de Gobierno socialista en la región.
María Guardiola ha señalado que su forma de entender la política "no es la de imponer proyectos, sino la de escuchar, recoger propuestas y generar debates" siempre sobre asuntos pegados a los intereses de nuestra tierra y de nuestras gentes, para así tener un partido "que sea un espejo con el que se sientan identificadas las personas".
Así, ha remarcado que ella quiere liderar un partido "que es de los militantes" y que debe aunar renovación, experiencia, talento y vocación de servicio público, porque así es la gente del PP.
Precisamente, ha recordado la futura presidenta popular, ha recorrido más de 9.000 kilómetros y todas las comarcas extremeñas en estos días para recoger el sentir de los extremeños".
Los extremeños, ha añadido, están esperando de nosotros que demos lo mejor y "os aseguro que no vamos a defraudarles" porque el proyecto que ha presentado María Guardiola se lleva a cabo desde la lealtad, sin ofender a nadie y asentado en tres pilares como son los de "escuchar, hacer y cumplir".
Ha insistido en la importancia de recuperar el valor de la palabra dada y en "revolucionar la política con la verdad". Y aunque reconoce que el camino del cambio no va a ser fácil, se logrará trabajando duro "con esfuerzo, dedicación, preparación, valentía y humidad" porque "no existen fórmulas mágicas"
En su alocución, en el patio del Hotel Extremadura de Cáceres, repleto de público, ha señalado que "no quiere límites para la región" y ha confrontado dos modelos: El de el PSOE que representa la política de la expulsión, con proyectos que se van y con jóvenes que se marchan, frente a una política de atracción, que es la que representa el PP.
Ha propuesto "acometer una revolución fiscal y económica" que permita a las familias, autónomos y empresas llevar a cabo sus proyectos en la región, indistintamente de si se reside en un núcleo urbano o rural. También ha reclamado mejores infraestructuras, como tienen en cualquier otro lugar del país o menos burocracia y trabas administrativas, entre otras cosas.
Infancia feliz y llena de risas
Durante su intervención, ha hecho un repaso a sus orígenes y sus primeros pasos en un pequeño piso de Cáceres en el que vivía 9 personas, de manera muy modesta, pero del que recuerda una infancia "muy feliz y llena de risas".
Ha reconocido que "gran parte de lo que soy hoy se lo debo a esa etapa" y los valores que ha aprendido. Ha agradecido a su familia el apoyo dado y a su madre ser su referente y la persona que le enseño a "ser valiente y a decir siempre la verdad".
María Guardiola ha concluido señalando que "empieza un nuevo ciclo para trabajar y construir una Extremadura mejor" en un reto que afronta "cargada de experiencia, de cariño y de fuerza".
