Ecologistas en Acción exige la "retirada" de la LEGIO y que Vara dé "explicaciones claras"

El colectivo Ecologistas en Acción Extremadura ha exigido la "retirada inmediata" de la propuesta de Ley de Grandes Instalaciones de Ocio (LEGIO) así como la comparecencia del presidente de la Junta, Guillermo Fernández Vara.

Para la organización ecologista, el Ejecutivo regional y el grupo que lo sustenta, el PSOE-SIEX, "han intentado" crear una ley "a medida de un proyecto insostenible a nivel social, medioambiental y jurídico pero, finalmente, es el propio promotor quien se retira".

Así, los ecologistas consideran "vergonzoso" que desde el inicio de la tramitación de esta propuesta de ley "se haya pretendido legislar a favor de una única empresa", en lo que han tachado de "actitud servil" que ha supuesto "un esfuerzo jurídico y parlamentario inútil".

Además, ha afirmado que, "como ya quedó claro en otros proyectos ideados para otras comunidades autónomas, el coste de crear las infraestructuras asociadas requeridas en estas instalaciones hace imposible que sean rentables".

Del mismo modo, esta organización ha valorado que la "deriva legislativa" de la Junta "pone en evidencia que no dispone de ningún plan estratégico" para la región y que la Administración autonómica "se aferra a cualquier tipo de proyecto en busca de ingresos para las arcas autonómicas, sin cuestionarse las implicaciones y consecuencias que puedan tener" para la comunidad autónoma.

Igualmente, Ecologistas en Acción ha recordado que ha expresado "reiteradamente su oposición" a la LEGIO, la "última ocasión" en una comparecencia en la Asamblea de Extremadura, y ha afirmado que continúa "dispuesta a presentar alegaciones a la misma" en caso de que la Junta "persista en el empeño de su tramitación".

Finalmente, ha apuntado que "resulta evidente" que los proyectos "que pretende amparar" la LEGIO se encuentran "en las antípodas de la Estrategia de Economía Verde y Circular" propuesta por la Junta pues, "difícilmente se pueden integrar en ella iniciativas empresariales que suponen una gran presión sobre los recursos existentes -especialmente el agua- o dependen directamente de modelos de movilidad (vehículos y aviones) contraproducentes en el actual contexto de cambio climático y que en un futuro próximo serán inviables".