24 abril 2018 | Publicado : 16:50 (24/04/2018) | Actualizado: 00:19 (25/04/2018)
Ep.
El presidente de Asaja Extremadura, Ángel García Blanco, ha anunciado que su organización va a acudir a los tribunales europeos si la Confederación Hidrográfica del Tajo (CHT) no se hace cargo de los daños que han supuesto las inundaciones del río Tiétar, en el norte de la provincia de Cáceres, provocadas por el desembalse del pantano de Rosarito y que la organización cifra en 1.721.299 euros.
En concreto, estos daños fueron provocados por las "fuertes lluvias" que cayeron los días 9 y 10 de marzo y que dieron lugar a "graves inundaciones" que han afectado a unos 108 agricultores que vieron anegadas más de 938 hectáreas de cultivos, de las que poco más de 164 hectáreas sufrieron "daños graves" con corrimientos de tierra y pérdida de la superficie.
García Blanco ha achacado esta situación a la "falta de previsión" de la CHT y al "abandono" del cauce del Tiétar, que ha calificado de "auténtico vertedero".
Además, ha señalado que la organización ha intentado reunirse con responsables del organismo de cuenca para llegar a un acuerdo pero no se ha producido ese encuentro.
Por ello, Asaja Extremadura ha dado un plazo de quince días para que la confederación conteste a sus peticiones antes de acudir a los tribunales de la Unión Europea a denunciar la "negligencia, prepotencia e incapacidad" de CHT y ha pedido que se haga cargo de los daños.
García Blanco ha recordado este martes en rueda de prensa que los agricultores pagan un canon de regulación de agua para "hacer frente a necesidades que puedan surgir por inundaciones, por lo que ha instado a la CHT a que utilice este dinero para reparar las infraestructuras o si no, que "no se cobre a los agricultores".
Según el presidente de Asaja Extremadura, la valoración de los técnicos de la Junta de Extremadura cifra en 1.228.218 euros los daños en producción agraria y en 492.080 euros en infraestructuras, ya que se incluye el destrozo de semilleros de tabaco, plantaciones de espárragos y muros de contención como el de Rivero Grande en Jaraíz de la Vera (Cáceres).
García Blanco ha pedido el "mismo trato" para los agricultores extremeños que para los aragoneses, en alusión a las últimas inundaciones producidas por la crecida del río Ebro, donde el Gobierno central ha puesto en marcha actuaciones "urgentes" y la Confederación Hidrográfica del Ebro ha respondido "de modo inmediato".
Incluso dentro de la comunidad autónoma, el responsable agrario critica a la Junta de Extremadura de "mirar para otro lado", y de no tratar por igual a las dos provincias, ya que los agricultores del Guadiana "tuvieron derecho a indemnizaciones" por los desembalses de la Serena y el Zújar, por lo que se ha preguntado si los agricultores cacereños son "de segunda categoría".
