13 noviembre 2017
Hacia la mitad del set el equipo pacense empezó a creerse que podían hacer algo más. De un 4-11 se pasó a un 13-14 y las ilusiones renovadas. Pero el equipo palentino no permitió la resurrección de su rival y en cuanto pudo cerró el set con un explícito 19-25.
El segundo set no tuvo atisbo de remontada, terminó con un idéntico 19-25, pero sin la vibración que había caracterizado al primero.
En el tercero, los ánimos estaban a flor de piel, y cada jugada fallada o no convertida era una losa. Pero frente al desánimo, Ismael Pérez animó con más ahínco a sus compañeros, que se contagiaron de su espíritu volviendo a conseguir apretar el marcador a mitad del set.
El 16-19 tras un parcial de 7-1 daba pie a seguir peleando. Pero de nuevo el CyL Palencia tiró de oficio, explotó sus puntos fuertes y puso con el 20-25 el definitivo 3-0.
Fue un partido que en el que el marcador enmascara sensaciones. Por fases del partido ambos equipos pelearon de tú a tú, dando lugar a intercambios acrobáticos y regalando jugadas enormemente intensas y divertidas. El Extremadura Hotel Río Badajoz se fue de nuevo de vacío, pero las sensaciones fueron diferentes.
