12 abril 2021
Ep.
El Consejo de Transparencia y Buen Gobierno ha instado al Ayuntamiento de Villanueva de la Vera (Cáceres) a entregar a la Asociación Nacional para la Protección y el Bienestar de los Animales (ANPBA) las actas veterinarias sobre el burro Peropalo.
Así, en una resolución, el Consejo de Transparencia notificó a ANPBA que dicha asociación posee el derecho legal de que el consistorio ponga a su disposición las actas veterinarias que dicha asociación solicitó relativas al estado físico y anímico del burro utilizado en el festejo Peropalo desde los años 2015 a 2020.
Esta resolución trae causa de la solicitud de acceso a información que ANPBA presentó formalmente ante este ayuntamiento para que pusiera a disposición de la asociación las actas veterinarias que el consistorio, haya encargado anualmente a veterinarios designados, dada la función 'in vigilando' y el deber legal que tiene de proporcionar la "adecuada protección" al animal, según dispone la Ley extremeña de Protección Animal.
De esta forma, como el Ayuntamiento de Villanueva de la Vera no remitió a ANPBA todas las actas, sino "sólo algunas", y al haber planteado la asociación una pregunta al ayuntamiento sobre el acta de 2019 sin recibir respuesta, dicha asociación presentó una "reclamación" ante el Consejo de Transparencia nacional que ha sido estimada, ha informado dicha asociación en nota de prensa.
Así, como indica la resolución, "se debe concluir que la documentación solicitada constituye información pública, puesto que obra en poder de un sujeto incluido en su ámbito de aplicación, el Ayuntamiento de Villanueva de la Vera, que la ha adquirido en el ejercicio de sus funciones. En conclusión, deben estimarse las reclamaciones planteadas" por el presidente de ANPBA, Alfonso Chillerón.
Las actuaciones de ANPBA ante el Ayuntamiento de Villanueva de la Vera se unen así al escrito formal que también ha presentado ante la Consejería de Agricultura de la Junta en el que fundamenta que, en el Peropalo de Villanueva de la Vera, el burro es sometido a "presuntos tratos antinaturales prohibidos en la Ley extremeña de protección animal", en vista de las condiciones consustanciales en las que se desarrolla el festejo.
Dichas condiciones "atentan contra el bienestar del burro", como son los constantes gritos del público, disparos, sirenas, cencerros, tambores, la muchedumbre que se agolpa contra el animal y le empuja.
"En definitiva, el burro sufre un estrés inimaginable, demostrable, entre otras cosas, por el intenso sudor, el posicionamiento de las orejas, su renuencia a andar, sus caídas, etcétera", ha apuntado la asociación.
Por ello, ANPBA entiende que, a estas alturas del siglo XXI, se impone que, al igual que el Peropalo es un muñeco y que la burla (judiá), la condena y la posterior ejecución de Peropalo, son simbólicos, los peropaleros deben construir otro muñeco que simbolice al burro, de cartón piedra, madera, goma-espuma, lo cual no desvirtuaría el 'espíritu' de un festejo que es "pura y estrictamente simbólico", como ocurre en diversos municipios de Murcia y Lérida, en los que se utilizan burros de cartón piedra o peluche en sus festejos.
