05 febrero 2021 | Publicado : 14:02 (05/02/2021) | Actualizado: 14:08 (05/02/2021)
Cáceres, concretamente un terreno de la Finca El Cuartillo, propiedad de la Diputación cacereña, es el lugar por el que el Ministerio de Ciencia e Innovación ha manifestado su interés para instalar el Centro Nacional de Investigación y Almacenamiento de Energía (CNIAE), con una inversión de 70 millones de euros en dos años.
Un proyecto que sitúa a la capital cacereña y a la región en su conjunto en un punto fundamental para avanzar en la transición ecológica, trabajando en la gestionabilidad de las energías renovables y su almacenamiento.
Con este asunto sobre la mesa, el presidente de la Diputación de Cáceres, Carlos Carlos, se ha reunido este viernes, en el Palacio Provincial, con el secretario general de Ciencia, Tecnología, Innovación y Universidad de la Junta de Extremadura, Jesús Alonso, y con el rector de la Universidad de Extremadura, Antonio Hidalgo, con el fin de agilizar los trámites para la cesión, por parte de la Diputación, a la Junta de los terrenos donde se podría ubicar el Centro.
El presidente provincial ha explicado que el lugar sería en la finca El Cuartillo, entre el Polideportivo provincial y la Universidad, un terreno de más de 100 hectáreas, que en su día fue cedido a la UEX y que ahora debe revertir a la Institución provincial para que ésta haga la cesión a la Junta y, posteriormente, al Ministerio.
De esas más de 100 hectáreas, la extensión que se requeriría para la construcción del centro se calcula en torno a las 30 hectáreas, por lo que, “ha sido una reunión técnica -ha apuntado Carlos Carlos- para decidir y agilizar lo máximo posible la cesión”.
“Si el Ministerio tiene interés en este proyecto, la Junta también, el Ayuntamiento, la Universidad y la Diputación, si todos los implicados tenemos interés en él -ha aseverado- tenemos que agilizar al máximo los trámites administrativos”.
Por su parte, el secretario general de la Junta ha manifestado que “para Extremadura, es un auténtico orgullo tener este centro, que trabajará en red con otros centros nacionales y que nos permitirá posicionarnos, porque aunque es nacional tendrá vocación internacional y podremos atraer a los mejores investigadores, convirtiéndonos en un polo tecnológico para alcanzar la gestionabilidad de las energías renovables”.
El rector ha destacado el papel clave de la Universidad, “que va a desarrollar la tecnología futura, unida a la formación de futuros profesionales”.
Este proyecto de 70 millones de euros para dos años, contará este año con una partida de 34,5 millones, y 35,5, en 2022, para poder tener el centro en marcha en 2023, tal como establece el programa de la Unión Europea Next Generation, en el que se enmarca.
