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18 marzo 2020
Ep.
El Ayuntamiento de Cáceres ha puesto a punto las instalaciones del albergue municipal, situado en el recinto del edificio Valhondo, por si se necesita para alguna emergencia o por si se tiene que poner a disposición de cualquier administración para su uso inmediato ante la crisis sanitaria del coronavirus.
Así, se han limpiado y desinfectado las 18 habitaciones de las que dispone este edificio que estaba cerrado y no prestaba servicio en la actualidad.
Asimismo se ha revisado el funcionamiento del suministro de agua y los sistemas de calefacción para comprobar que todo está en perfecto estado pero, de momento, las habitaciones del edificio siguen cerradas a expensas de hacer uso de ellas en caso de necesidad.
El alcalde de la ciudad, Luis Salaya, ha explicado en una rueda de prensa online que el edificio ha sido desinfectado y ha quedado "en muy buenas condiciones" pero las habitaciones, de momento, quedan clausuradas.
"No vamos a utilizar para nada esas dieciocho habitaciones pero ya están desinfectadas y preparadas por si por cualquier situación es necesario hacer uso de ellas por parte del ayuntamiento o cualquier otra administración", ha explicado Salaya.
"Vamos haciendo trabajo para ser precavidos y adelantarnos a cualquier situación que pueda darse", ha resaltado.
CENTRO DE DÍA PARA PERSONAS SIN TECHO
En ese mismo edificio, pero en la planta baja, se ha habilitado la cafetería para que las personas sin hogar puedan usarlo como centro de día, tal y como se ha informado ya. Ésta es la única zona accesible en todo el recinto, ya que el resto de dependencias municipales se han cerrado al público y a los trabajadores.
Además de Valhondo, también se ha cerrado la Universidad Popular y en el edificio principal del ayuntamiento no podrá entrar nadie que no esté habilitado para el trabajo presencial.
Los que puedan realizar alguna labor desde su casa, tienen autorización para ir un rato a realizar un trabajo puntual y después marcharse a sus casas y seguir el trabajo desde allí, según ha explicado Salaya.
El objetivo es que cada vez sean menos los trabajadores que acudan presencialmente a trabajar para evitar la propagación del coronavirus.
De hecho, la propia reunión del grupo que se ha creado para coordinar las acciones municipales y que se realiza cada mañana se hará ya a través de videoconferencia.
