02 julio 2019
Ep.
Miguel Grande, de 72 años de edad, se ha encaramado a uno de los cedros más altos del Paseo de Cánovas en Cáceres para protestar por la destrucción de tres de los nidos que él mismo hace y expone en la calle José Espronceda del barrio de Mejostilla, en la capital cacereña.
De una de las ramas del árbol ha colgado un cartel en el que se podía leer: "Hago nidos grandes. Tenía diez y me han quemado tres. Pido ayuda al ayuntamiento. No quiero dinero".
Después, hacia las doce del mediodía, ha trepado hasta un nido de cigüeña y allí ha permanecido durante unos 40 minutos.
Grande, que se hace llamar "el hombre pájaro" ha bajado por su propio pie cuando ya se habían desplazado hasta el lugar de los hechos una dotación de bomberos para ayudarle a bajar.
La Policía Nacional ha tenido que acordonar la zona debido a la expectación que ha suscitado este acto de protesta, que ha congregado a numerosos viandantes que pasaban por el céntrico paseo a esa hora.
Cuando ha descendido del árbol, dos agentes se lo han llevado para cogerle declaración. Lo que quiere este hombre es que el ayuntamiento le ceda un lugar donde poder exponer los nidos que él mismo fabrica y que se ajustan a la realidad de cómo las hace cada una de las especies de aves a las que representa.
Fabrica los nidos con restos de poda que se desechan y tenía expuesta su creación en el barrio de Mejostilla, aunque algunos de los nidos han sufrido daños debido a un incendio.
