Reportajes

Científicos del MIT se ven cerca de una energía verde, ilimitada y barata

Es una realidad que los principales recursos del Planeta Tierra son limitados y cada vez está más cerca de su agotamiento.

La población mundial va creciendo de forma constante y no existe la posibilidad de hacer frente a las necesidades de la humanidad, es necesario el desarrollo de energías ilimitadas, además de la urgencia imperativa de que estas colaboren con el buen estado y mantenimiento del medio ambiente ante una situación de cambio climático tan presente en este siglo XXI, la tierra ya está dando la voz de alarma y necesita ser escuchada.

Una de las novedades más innovadoras en este aspecto la ha presentado una compañía del MIT, la cual ha dado con el quid de la cuestión, con una propuesta en la que se presenta el uso de las ya existentes centrales térmicas como plantas de energía verde sin limitaciones, infinitas. Este propósito se consigue utilizando el magma terrestre al que se puede acceder desde cualquier punto geográfico del planeta y que sirve como fuente de calor.

Esta empresa asegura que este procedimiento proveerá de electricidad a la población de forma ilimitada, durante más de 20 millones de años, y prácticamente gratuita, añadiendo su respeto por el planeta, siendo 100% verde. Con este tipo de energía, se usa apenas un 0,1% del calor del magma terrestre y hasta ahora, esta energía geotérmica, solo la estaba usando un país en todo el mundo, Islandia, algo que se va a ampliar al resto del mundo gracias a esta compañía salida del MIT, cuyo nombre es Quaise.

Todo lo que dice Quaise

Esta empresa innovadora centrada en la energía geotérmica está compuesta por un grupo de ingenieros del Instituto Tecnológico de Massachusetts y han ideado un nuevo taladro que permite llegar hasta profundidades de 20 kilómetros, algo que hasta ahora había sido imposible con la tecnología con la que se contaba.

Es preciso indicar que el magma terrestre se encuentra a unos 5.2000 grados centígrados y está compuesto por níquel y hierro, pero no hay por qué llegar a ese punto, está comprobado que con 20 km de profundidad es suficiente siguiendo datos facilitados por la ya experimentada Islandia. Si se consigue llegar a ese punto cualquier país tendrá acceso a esta energía ilimitada para calefacción, agua caliente y electricidad, independientemente de los símbolos de la electricidad, obviando el uso de combustibles fósiles y siendo autosuficiente en lo que a energía respecta, a un precio muy económico.

Todas son ventajas derivadas del uso de la energía geotérmica, pero a esto hay que sumar que la humanidad podrá continuar desarrollándose por millones de años aún sin tener que generar CO2 y prescindir de aquellas fuentes de energía que resta tanto espacio como salud a la naturaleza del planeta, salvaría el futuro catastrófico que se presenta de aquí a unos años.

Funcionamiento del sistema de Quaise

En sus comienzos, este proyecto se inició con la creación del novedoso sistema de perforación haciendo uso de un girotrón, el cual usa un haz de electrones amplificada en una cavidad hueca de resonancia, el campo magnético que se encuentra en su interior acelera los electrones y amplifica la energía de las microondas. Con esto lo que se consigue es que el taladro consiga vaporizar cualquier roca que se encuentre en su camino.

Sobre lo expuesto anteriormente, desde Quaise se ideó el uso de las instalaciones de las centrales térmicas convencionales para que, con una infraestructura de reconversión, finalice en el tratamiento de los combustibles fósiles y pase a la energía geotérmica.

Como resumen y para simplificarlo, los primeros kilómetros de perforación se realizarían de la forma habitual y a partir de ahí se haría uso del nuevo taladro hasta los 20 km. de profundidad. Quaise está segura de su éxito, tomando como ejemplo los volcanes, agujeros viables distribuidos por todo el planeta y que cuentan con una profundidad aún mayor.