Reportajes

El sexo en la Generación Z: menos tabúes y más juguetes sexuales

La generación Z ha nacido en una sociedad en la que el uso de juguetes sexuales se ha ido normalizando y tratando de forma cada vez más abierta.

En el caso de la conocida como Generación Z, los jóvenes nacidos entre finales de los años 90 y principios de la década de los 2000, se está comprobando como algunos tabúes se van extinguiendo y como la sexualidad se vive de una forma más abierta y con menos prejuicios.

La generación más entregada a los juguetes sexuales

La generación Z ha nacido en una sociedad en la que el uso de juguetes sexuales se ha ido normalizando y tratando de forma cada vez más abierta. Esto ha influido en que sienta una mayor libertad e inclinación a utilizar los juguetes sexuales cuando llegan a la edad de experimentar su sexualidad. Los jóvenes de ahora están más dispuestos a descubrir cada rincón de su cuerpo para saber qué es lo que más les gusta a nivel íntimo y sexual. Entre los jóvenes de la generación Z es muy habitual tener algún tipo de juguete sexual y es algo que se comenta entre amigos y amigas y que las parejas jóvenes utilizan para sus relaciones íntimas. El uso de estimuladores de clítoris, juguetes anales o dildos vaginales está muy extendido tanto entre las chicas como en los chicos y es algo que ni se oculta ni genera pudor. Es la generación que genera la mayoría de las ventas que registran las principales sex shops del país, que encuentran en los jóvenes su principal nicho de mercado. En sex shops online como www.easytoys.es son los clientes jóvenes los que compran juguetes sexuales en mayor medida y, sobre todo, son los que más curiosidad sienten por utilizar juguetes para experimentar con su sexualidad. Un cambio de mentalidad que supone un antes y un después respecto a las anteriores generaciones, especialmente la de sus padres.

Una generación sin tabúes en la intimidad

Según el Barómetro “Los jóvenes y el sexo”, elaborado por la empresa CONTROL, los jóvenes de la generación Z tienen menos tabúes y ven el sexo de una forma cada vez más abierta. Tanto es así, que hasta el 55,5% de los jóvenes que forma parte de este estudio utiliza las redes sociales para ligar y concertar citas que pueden terminar en encuentros sexuales. Los jóvenes de la generación Z siguen utilizando la técnica de ligar en lugares de ocio nocturnos en un 22,8% de los casos, un porcentaje muy inferior al de anteriores generaciones. Hasta un 40,9% ha admitido que ha mantenido relaciones sexuales con una persona que ha conocido a través de Internet, la cifra más alta de la historia. Y, sobre todo, llama la atención el porcentaje que admite haber practicado cibersexo, con un 35% de los jóvenes encuestados.

La generación Z, la menos heterosexual de la historia

Este aperturismo mental de la generación Z también se traslada al hecho de experimentar con la sexualidad y la orientación sexual. Es algo que en España está teniendo un gran impacto en la gente joven, pues tenemos el segundo mayor porcentaje de toda la Unión Europea de jóvenes que se definen como parte del colectivo LGTB. Hasta un 25% de los jóvenes españoles, según el portal de estadísticas Statista, muestra interés en experimentar relaciones sexuales con personas de su mismo sexo. Es la cifra más elevada de todas las generaciones, ya que a partir de los 34 años solo el 9% de la población afirma tener la necesidad de experimentar con ello. Es por ello que la generación Z se considera como la menos heterosexual de la historia. En torno al 10-11% de los jóvenes de esta generación se consideran homosexuales (gays o lesbianas) y en torno al 48% se consideran únicamente heterosexuales, el menor porcentaje de todas las generaciones. Y es que existe un rango cada vez mayor, entre el 25% y el 35%, que no se considera ni 100% heterosexual ni 100% homosexual. Esto es gracias a que las nuevas generaciones han nacido en una sociedad más abierta donde existen menos tabúes y menor temor a confesar que se sienten atracciones sexuales más allá de la heterosexualidad. Esto, unido al mayor uso de juguetes sexuales, convierte a la generación Z en una de las que más ha profundizado en su sexualidad para conocerse mejor a sí mismos y sus gustos y preferencias. Esto no quiere decir que sea la generación que más sexo ha practicado, pues existen estudios que afirman que practican menos sexo que sus padres y sus abuelos. En definitiva, una generación que ha llegado para cambiar los hábitos sexuales y la forma de disfrutar de la intimidad.