Junta niega problemas en el aire acondicionado del Hospital de Mérida y PP lo critica

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La situación del Hospital de Mérida durante la ola de calor, tras unas imágenes aparecidas en las redes sociales con ventiladores en las habitaciones, han provocado un cruce de declaraciones entre la Junta de Extremadura y el PP.

El consejero de Sanidad y Políticas Sociales de la Junta, José María Vergeles, ha aseverado que el Hospital de Mérida "no ha tenido" durante la ola de calor, ningún problema en ninguno de los siete compresores de aire acondicionado" de los que dispone.

A preguntas de los periodistas en rueda de prensa en Mérida, Vergeles ha replicado que se fía "poco de las redes sociales", y ha aclarado que en la climatización "no solo influye" el aire acondicionado sino "también otros factores".

Unos factores entre los que ha citado la envolvente del edificio" en la cual se producen, "en ciertas ocasiones", aperturas de ventanas "cuando no se deben abrir" o "más visitas de las deseables" en las habitaciones de los pacientes, generando calor e "impidiendo que la refrigeración sea la adecuada".

Así, el consejero de Sanidad ha destacado que "no culpa a nadie", al tiempo que ha instado a la ciudadanía a "colaborar y hacer un uso responsable" de la climatización de los hospitales.

MONAGO LO TACHA DE "DESASTRE"

Sobre este mismo asunto, el presidente del PP de Extremadura, José Antonio Monago, quien ha considerado "manifiestamente mejorable" la gestión de José María Vergeles, ya que "él siempre miente, porque lo niega".

"Hay fotografías de esos ventiladores que han tenido que llevar los familiares", ha señalado Monago, que ha calificado de "desastre" esta situación, que "tendría que ser un motivo de reflexión" el que los hospitales extremeños estén "en esas condiciones".

Ante esta situación, Monago ha apuntado que no ha "escuchado a nadie de los sindicatos hablando sobre este tema", pero cuando gobierna el PP "se sacan lo megáfonos".

Lo mismo ocurre con el tren, ha dicho, que "hay un reguero de incidencias y gente por los barbechos, con los taxis y con los autobuses", ante lo que ha señalado que "cuando estaba el PP, qué malo es el PP, pero ahora como es el PSOE, pues todos callados".

Una situación que Monago ha achacado a la "sociedad de silencios selectivos en función de quien gobierne" y "eso ocurre cuando no hay libertad" y cuando hay un "exceso de dependencia de la administración", y cuando "se engrasa a uno para que no salgan en determinados momentos".