Economía

Podemos defiende la 'conciliación' en sector apícola

La formación morada apuesta por la 'conciliación' entre el mantenimiento de la biodiversidad y la viabilidad del sector apícola

En nota de prensa, Podemos Extremadura ha advertido de que el sector apícola "está al límite" y que su rentabilidad está decreciendo, a lo que ha unido el "efecto de los abejarucos".

Según la formación, "a los problemas de salud de las abejas (enfermedades, parásitos, venenos autorizados, etc.), se añade ahora el efecto de los abejarucos, por lo que no se debe tratar este caso de forma simple como una nueva dificultad para el sector, sino que se debe analizar la viabilidad del sector en su conjunto".

Por ello, considera que es "imprescindible" revisar el modelo productivo extremeño y de comercialización para buscar "soluciones globales".

Así, la secretaria de Modelo Productivo de Podemos Extremadura, Carmen Ibáñez, ha considerado que "ha llegado el momento" de que la región no se conforme en ser productores de materia prima ni de materia secunda.

Junto con ello, indica que "se trata de no conformarnos con comercializar un producto sin más, o al que se aplique cierto grado de transformación, como puede ser la miel o el polen envasados al por menor".

De esta manera, para obtener una "mejora comercial notable", Podemos propone que a los productos apícolas se le puede dotar de "peculiaridades" a la hora de comercializarlos y que pueden ser referidas a un "proceso productivo singular, vinculación a una geografía destacada, etc".

Además, Ibáñez ha argumentado que para el caso de la miel "merece la pena explorar un sector creciente para el que la producción conciliada con el entorno ambiental debe ser potenciada y así contribuir a posibilitar un equilibrio, que en la actualidad está en retirada".

Por último, ha remarcado que las medidas propuestas por los grupos ecologistas, Equo y Podemos van encaminadas a constituir contratos de custodia del territorio entre apicultores y la administración que garanticen la convivencia de los abejarucos en los colmenares y que vinculen la obtención de recursos económicos con el mantenimiento de la biodiversidad.

También a establecer ayudas directas que compensen la pérdida de rentabilidad derivada de la convivencia de los abejarucos en los espacios donde se desarrolla la apicultura, para lo cual es necesario contabilizar el impacto económico negativo achacable a los abejarucos.

Y, sugiere evaluar el redireccionado de las políticas comerciales extremeñas hacia la calidad y distinción de sus productos y favorecer cambios de modelo de comercialización, de manera que se cree un nicho de mercado para mieles producidas en espacios que conviven con abejarucos.