Cáceres y Provincia

Trasladan al Defensor del Pueblo y Fiscalía la situación de Residencia Asistida de Cáceres

Hasta el pasado lunes habían fallecido 67 usuarios, según los datos ofrecidos por el SES, lo que supone una tasa de letalidad del 47%.

Ep.

Familiares de usuarios de la Residencia Asistida 'El Cuartillo' de Cáceres, han trasladado al Defensor del Pueblo, a la Fiscalía Provincial y a la Gerencia Territorial del Servicio de Atención a la Dependencia (Sepad) la situación de este centro asistencial, en el que han, hasta el pasado lunes, han fallecido por Covid-19 un total de 67 personas, según los datos ofrecidos por el Servicio Extremeño de Salud (SES).

La información facilitada a la oficina del Defensor del Pueblo en Madrid sobre esta residencia adscrita a la Junta de Extremadura, y a la que ha tenido acceso Europa Press, asegura que en este centro de mayores, que cuenta con 320 plazas, han fallecido 47 de cada 100 usuarios contagiados, lo que supone una elevada tasa de letalidad.

El informe se acompaña de varias noticias aparecidas en los medios de comunicación regionales en los que se describe "la situación que se padece en el citado centro", que se achaca a dos causas "fundamentales", como son la protección de los propios trabajadores del centro y el aislamiento y distanciamiento social adecuado de los residentes, que "han brillado por su ausencia", apunta.

Así, se denuncia que durante varios días después de declararse el estado de alarma, los usuarios han seguido bajando a comer juntos y en grupo, según testimonio de trabajadores de la residencia, que también han criticado los "pocos medios con los que cuentan para que los trabajadores estén debidamente protegidos". Incluso, "ha habido sanitarios trabajando con el virus sin que se les haya hecho el test", según otros testimonios que se acompañan al informe.

También se constata que "los equipos de protección (EPIs) a los trabajadores no empezaron a dárselos hasta el día en que la Inspección de Trabajo y Seguridad Social (ITSS) emitió requerimiento a la Junta de Extremadura para que lo hiciera de forma inmediata y generalizada a todos los trabajadores del centro", recoge el escrito dirigido al Defensor del Pueblo, que añade que hasta el 4 de abril no se dispuso de este material, 22 días después de decretarse el estado de alarma.

"El contagio, consecuencia de todo ello, ha sido masivo de trabajadores a residentes y entre los propios residentes por no aportar la Junta de Extremadura los medios de protección necesarios y el aislamiento adecuado de los residentes", apunta el informe, que reprocha que no ha existido "aislamiento real" de los residentes y "no ha sido garantizado ni verificado adecuadamente hasta que los familiares y trabajadores así lo han expresado en prensa".

RESPONDER A PREGUNTAS

Los familiares afectados quieren que el Sepad y la Junta de Extremadura respondan a las preguntas que se le han formulado y concreten las fechas en las que se han ido tomando las decisiones de aislamiento de los usuarios, registro de temperatura o realización de test a residentes y trabajadores.

Para ello se ha pedido la "cronología exacta de fechas" de la situación "real" de esta residencia de la capital cacereña, la más grande de toda la región en cuanto al número de plazas.

"A lo publicado en la prensa me remito para evidenciar que la Junta de Extremadura no ha ofrecido a tiempo a la Residencia Asistida de Mayores 'El Cuartillo' de Cáceres los medios ni el personal para llevar a cabo ni un aislamiento, ni un distanciamiento social, real y efectivo de los residentes", asegura el firmante del escrito.

Asimismo, lamenta que los "esfuerzos" que han realizado los trabajadores no han podido conseguir, que ese aislamiento y distanciamiento social entre residentes, "fuera real y efectivo", pues "han carecido de medios y de los refuerzos necesarios para ello".

"Si la Junta hubiera decidido intervenir la residencia, por el SES o por la UME, ahora no estaríamos hablando de este inmenso número de fallecidos ni el centro sería conocido con la misma denominación que el subtítulo de uno de los libros de Adam Bujak: Residencia de la muerte", concluye el escrito.