15 febrero 2017
Uno de los destinos predilectos de Europa, sin duda es París. Si no se tienen suficientes días, lo mejor es ir al grano y así poder ver bastantes cosas. Es posible que algunas no sean lo que esperabas, otras simplemente te gusten y otras te maravillen.
Nada más pisar París, hay que ir directos al Palacio de Versalles, está a 45 minutos del centro, pero bien vale la pena el trayecto. Se trata de un espectacular edificio que desempeñó las funciones de una residencia real en siglos pasados. El paseo por el palacio y sus verdes jardines acompañada de música es una experiencia muy gratificante, puedes tener la suerte de ver en persona los espectáculos en los que las fuentes mueven sus aguas al ritmo de la música, algo que sólo dura hasta octubre. Así que ya sabéis, si para el año que viene queréis hacer una escapadita a París hacedlo entre estas fechas y buscad coches baratos de alquiler en Expedia.es para que no os perdáis nada.
El siguiente plan es ir a Rue de Rennes, conocida calle de tiendas de marca, sí, no podrás resistirte a hacer algo de shopping, ¡a pesar de que esté abarrotada de gente!, sin duda una de las calles comerciales más concurridas de París. Por ejemplo, hay tiendas tan conocidas como H&M, Agatha, Mango y Naf Naf.
Notre Dame y El Louvre
También debéis echar un vistazo por el Boulevard de Saint Germain, dónde se ubica la iglesia más antigua de París, si he de ser sincera no me causó un gran impacto. Y visitar la iglesia Saint Sulpice, casi tan grande como la de Notre Dame. Saint Germain me maravilló, es una zona perfecta para ir tranquilamente de paseo y terminar la noche rodeada de ¡la reluciente y brillante París!
Si tienes otro día, es visita obligada ir a ver El Louvre y El Arco del triunfo. Te gustará mucho la parte egipcia, las pinturas impresionistas, y algunas obras de Rembrandt y de nuestro Goya. Después de una mañana agotadora, dar un relajante paseo por el Jardín de las Tullerías, hasta llegar a El Arco del Triunfo, a pesar de que es bastante inferior en altura a la Torre Eiffel, es bastante imponente.
Y lo mejor para el final, la Torre Eiffel. Recomendamos visitarla tanto de día como de noche, ¡cambia completamente con las luces!, y subir en ascensor, 1.665 escalones no los sube cualquiera. Si tienes clara tu visita aquí, puedes comprar los tickets de manera anticipada, te ahorrarás una buena cola, visita obligada.
