23 abril 2024
El secretario técnico de La Unión Extremadura, Luis Cortés, ha informado de que su organización agraria ha remitido un escrito al delegado del Gobierno, José Luis Quintana, en el que le pide explicaciones por la "discriminación" que a su juicio sufren los arroceros de la región respecto a los de otras zonas del país.
En concreto, advierte de que un arrocero extremeño "cotiza 10 puntos más que un arrocero catalán" con la misma dotación de agua, algo que a su juicio "no es un trato de favor a los productores catalanes, es una clara discriminación por ser extremeño".
Además, recuerda que el pasado 19 de abril se publicaron en el BOE los índices de rendimientos en el método de estimación objetiva en el IRPF del año 2023 en el que se reducían los módulos del cálculo de cotización de los distintos sectores agrarios.
En esta orden, según ha apuntado Cortés en una rueda de prensa este martes en Mérida, se reducen los módulos del cultivo del arroz en Andalucía (excepto Huelva) a un módulo del 0,06, en Cataluña se reducen los módulos a un 0,22, todo ello por el impacto de la sequía en el cultivo, pero "en cambio en Extremadura con una sequía que ha afectado por segundo año consecutivo al 38% de la superficie, el Ministerio de Hacienda no ha querido disminuir la cotización de los agricultores extremeños".
A este "estacazo" fiscal hay que unir, incide, las importaciones "masivas" de arroz del sudeste asiático de "mala calidad" que "han hundido" el precio del producto.
Por si no fuera suficiente, según Luis Cortés, de las 21.000 hectáreas de arroz, hay "más de 1.000 agricultores con una superficie de 7.182 hectáreas afectados por la ZEPA arrozales de Palazuelo y Guadaperales, que les está provocando pérdidas económicas importantes por las normas que impone dicha zona", según explica en una nota de prensa La Unión Extremadura.
"Si el cultivo no es rentable, si sólo se puede regar cada ciertos años, si el Ministerio de Hacienda discrimina a este cultivo y si además nos imponen medidas medioambientales exclusivas, el cultivo no es en absoluto atractivo para los productores, muchos de los cuales están modificando (cuando pueden hacerlo) por otros cultivos que al menos sean rentables", concluye.
