17 junio 2020
La Comisión Jurídica de Extremadura ha dictaminado a favor del Ayuntamiento de Cáceres para la resolución del contrato de ejecución de las obras de ampliación del cementerio municipal formalizado con la empresa Orizontia, que resultó adjudicataria.
En concreto, se trata de la construcción de 216 nichos y columbarios en la parte nueva del cementerio, cuyas obras fueron paralizadas por la empresa adjudicataria. Así pues, ahora, una vez resuelto el contrato, se va a proceder a liquidarlo y ya se trabaja en el proyecto para volver a licitar la ampliación.
De este modo, según se indica en el dictamen, "las obras se encuentran suspendidas y paralizadas por decisión unilateral de la empresa constructora y solo han sido ejecutadas en un porcentaje aproximado del 30% del total proyectado, lo que evidencia la voluntad de la empresa de no ejecutar el porcentaje de obra restante".
En este sentido, el concejal de Fomento, Andrés Licerán, ha considerado que ello constituye "un grave incumplimiento de las obligaciones esenciales del contrato, pues afecta no solo al plazo final de entrega de las obras, y no se trata de un mero retraso; sino también a la imposibilidad de recepción de las mismas, ya que se encuentran ejecutadas en menos de un tercio de lo previsto".
"Además, tal incumplimiento debe reputarse culpable, no concurriendo ninguna causa de exoneración de la responsabilidad de dicha empresa en el cumplimiento del contrato", recoge el dictamen de la Comisión Jurídica.
De las diferentes cuestiones propuestas por la empresa adjudicataria durante la ejecución del contrato y de los argumentos esgrimidos sobre la resolución del contrato, "no se deduce ninguna razón que justifique un abandono unilateral de las obras".
Como la obra, una vez finalizado el plazo de ejecución de seis meses establecido en los pliegos y en el contrato, "solo se ha certificado en el 36,74%, y además se encuentra abandonada unilateralmente por el contratista desde el 26 de noviembre de 2019, concurre la causa de resolución del contrato por el incumplimiento del plazo total de ejecución", añade el informe.
Además, le será incautada la garantía y deberá, además, indemnizar a la Administración los daños y perjuicios ocasionados en lo que excedan del importe de la garantía incautada, según informa el Consistorio cacereño en una nota de prensa.
Licerán, ha recordado que la empresa Aguaema, que estaba ejecutando el proyecto de ampliación, "paralizó la obra a medidos de noviembre del año pasado, sin llegar a un acuerdo con el Ayuntamiento". La obra se adjudicó con el anterior gobierno del PP y tardó más de seis meses en iniciarse.
OBRA DE EMERGENCIA
"El equipo de Gobierno intentó por tres veces resolver el contrato con la adjudicataria pero se opuso y, por este motivo la Comisión Jurídica de Extremadura ha sido la que ha tenido que dirimir la solución, que ha sido favorable al Ayuntamiento", ha defendido Licerán.
Ante la falta de nichos en el cementerio y que se hayan tenido que hacer enterramientos en la parte vieja, el Gobierno acudió a los servicios técnicos municipales que redactaron el proyecto para acometer la obra con "carácter de emergencia".
"Decidimos tramitarla como obra de emergencia para poder terminarla cuanto antes, pues hasta no tener ese dictamen había que ir buscando soluciones", ha dicho el concejal.
Cabe recordar que se adjudicó por 87.042 euros, menos de la mitad de la adjudicación que había anteriormente, porque sólo se actúa en la parte que se necesita con cierta urgencia. Solamente se van a construir 108 nichos y no se hará nada de los alrededores, accesos o decoración, concluye el Consistorio cacereño.
