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Región Digital

Augustóbriga y sus templos

06 marzo 2024

El niño se pasó la manga de la camisa raída por la cara para secarse el agüilla que le rezumaba de la nariz. Y también las lágrimas. Le habían dicho que mirase por última vez aquéllas columnas donde solía jugar las tardes de primavera con sus amigos. El alcalde le había contado a sus padres que las iban a desmontar para trasladarlas a un lugar más alto y así dejarlas a salvo del pantano que pronto lo inundaría todo. Pensó que algún día volvería para verlas. Quizá cuando fuese mayor. Pero para él esta sería la última vez durante... Ver noticia completa